Viva la falta de originalidad
Hay veces que, cuando leo los tomos de la línea Gaijin, con alguno de ellos me preguntó si uno de los requisitos que impone EDT para publicarlos es la falta de originalidad, porque si fuera el caso, a este manga es algo de lo único que puede descatar.
La historia se centra en Urah, un joven que en su vida cotidiana no destaca demasiado. Pero un día, mientras duerme, se ve trasladado al mundo de las Pesadillas, que se encuentra en un profundo caos porque la "Dama" del reino de los sueños se ha dormido y ahora todo está desequilibrado.
Como no, este joven resulta ser el "elegido" necesario para salvar dicho mundo, y junto con una hechicera tetona, un espadachín malhumorado y una ratoncilla de biblioteca, parte en un viaje para despertar a la "Dama", al mismo tiempo que tendrá que hacer frente al responsable de todo lo que ha ocurrido.
El problema llega cuando vemos a los personajes... Violeta, la hechicera, es una mezcla total de Blair y Soul, Megidoh la unión chulesca de Black Star con un personaje de Aoi Exorcist que ahora no recuerdo, y Urah... parece Chrona es versión masculina, bastante cutrecilla ya. Y no hablemos del "Rey de las Pesadillas"... salvo porque su cabeza es un esqueleto, podría ser Shinigami-sama, con un comportamiento de crío como el padre de Maka, solo que cambiando el ligoteo por el té.
Dejando esto a parte, la historia deja mucho que desear... nada de lo que aparece resulta algo "nuevo" ni "sorprendente", ni tampoco es que luzca mucho por lo que son las batallas que acaban enseguida y se encuentran muy sobrecargadas de efectos que hacen que uno se pregunten: ¿tanto rollo para luego no hacer daño?
En fin, no os diré como evoluciona la trama ni como acaba, pero si que mi opinión es más bien muy pero que muy negativa...
Lo mejor: La escena en los baños termales porque cambia un poco el rollo de "chico espía a chica" siendo al revés
Lo peor: Los personajes, la historia, el final... vamos, todo lo demás.
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